Cualidades del orador. La oratoria.


Si te propones tú puedes dar un discurso excelente.

Va depender mucho de ti debes saber que todos los hombres y mujeres en mayor o menor medida tienen la facultad de persuasión.

Lo que les falta a algunas personas es la elocuencia, es decir les falta la virtud de encandilar y persuadir empleando la palabra, la voz elegante, eficaz y persuasiva.

Algunas personas tienen innato ese don pero les falta cultivar esa cualidad es decir no estudiaron las reglas de la oratoria.

El que tiene dotes naturales pero no aplica correctamente las reglas de la oratoria no es un buen orador. Si se propusiera estudiar la retorica y sus reglas sus dotes naturales lo haría un excelente y elocuente orador. Para ello debe perfeccionar esas dotes con el estudio y el ejercicio, pon atención y anota estas premisas:

  • Las palabras bien pronunciadas.
  • El gesto metódicamente estudiado.
  • El ademán perfectamente calculado.
  • La entonación, las pausas y la dicción rítmicamente balanceadas causan la mejor impresión a la hora de hablar.

En cambio las palabras balbuceadas las poses desaliñadas y una voz sin ritmo, sin gracia y sin cadencia, cansan y causan un efecto muy negativo.

Si deseas empezar a practicar la oratoria, pronuncia bien un trozo literario compuesto por ti mismo. También es muy práctico trazarte un plan sencillo sobre un tema; divídelo en tres puntos o más, desarrolla cada uno de ellos uniéndolos entre sí para concluir con una proposición que ha de ser la tesis del discurso.

El orador 

El orador adopta actitudes para cumplir con su función ya que cuando pronuncia un discurso sobre un determinado tema está instruyendo en forma didáctica, pues el buen orador se dirige a todos los grupos sociales y culturales étnicos y de sexo, sin distinción. Es decir su auditorio debe ser completamente heterogéneo. Un buen orador no escoge su público.



Cualidades morales.- Esta cualidad es el mejor perfil de un orador. Este debe ser un hombre integro una de las bases de la oratoria es formar un hombre probo para hacerlo diestro en el arte de hablar.

El orador debe proceder, con la verdad no debe por ningún concepto defraudar a su auditorio, ya que la primera virtud del orador es veraz. Si la pieza oratoria trata un tema científico, debe prevalecer en todo el discurso la verdad.

Si el tema es moral, con mayor razón debe enaltecer en todo el discurso la verdad y los conceptos claros. La virtud no es innata, se adquiere a través del ejercicio serio y duradero de acciones buenas. La virtud es permanente, pero si se le frena, entonces se corre el riesgo de caer en lo opuesto, el vicio.

Las virtudes se dividen en dos clases: Virtudes del entendimiento y Virtudes de la voluntad.

Virtudes del entendimiento.- Perfeccionan al hombre en relación con el conocimiento de la verdad. Las virtudes del entendimiento son: la inteligencia o habilidad para juzgar; la sabiduría o capacidad para alcanzar hasta los últimos fundamentos de la verdad.

Virtudes de la voluntad.- Dentro de estas virtudes es destacable la prudencia que es la disposición con el que se debe de actuar para resolver con rectitud los casos más difíciles. Las virtudes intelectuales por si solas, no hacen al hombre moralmente bueno.




Las virtudes de la voluntad están ligadas entre sí y forman un conjunto cerrado.

Las cualidades Intelectuales.- Que deben adornar a un buen orador son.

La inteligencia.- Esta debe ser clara y penetrante para ahondar en los asuntos trascendentales; su agudeza de ingenio le permite tener una visión panorámica de todos los aspectos para desarrollarlos con amplitud de esa forma cada vez que se le solicite una aclaración lo haga con erudición y clarividencia.

Ayuda mucho al orador tener imaginación para encarar con imágenes sensibles ideas totalmente abstractas para ello se requiere de una destreza intelectual extraordinaria, capacidad de retención para recordad todos los datos que son necesarios para exponer con fluidez un tema.

Cualidades físicas.- Las cualidades mencionadas líneas arriba deben ir acompañadas de una buena presentación de la imagen pública. En suma debe ser un todo integral ya que un buen orador ha de estar dotado de un timbre de voz sonoro, la que debe producir un buen efecto. Los oradores que declaman tendrán siempre atento a su auditorio.

La oratoria

La oratoria es un arte llamado así porque en ella se ejercita la inteligencia ya que con ella el orador como el auditorio la aplican, la oratoria se divide en: oratoria sagrada, oratoria académica y oratoria social.

1.- Oratoria Sagrada.- La usan los ministros y sacerdotes de todas las iglesias. El orador sagrado o predicador intenta convertir a sus oyentes a la fe en Cristo. Por su estructura, la oratoria sagrada recibe el nombre de: homilía, sermones dogmáticos, sermones morales, discursos apologéticos.

2.- Oratoria Académica.- Este discurso se distingue por la ordenación exacta de las ideas, pureza en los vocablos, elegancia y armonía en las frases. Además se observan estrictamente las normas clásicas. Esta oratoria se divide en dos clases: oratoria literaria y oratoria científica.

3.- Oratoria Social.- Se usa en momentos solemnes en los que se requiere que alguien tome la palabra para concluir con una disertación un acontecimiento que será histórico.

1 comentarios:

Anónimo dijo... [Responder]

la oratoria es una forma de comunicacion ademas la oratoria se expresa de una manera de anunsiar al publico

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