Es una enfermedad del sistema nervioso central, afecta al cerebro, tronco del encéfalo y a la médula espinal.
Actualmente se desconocen las causas que la producen aunque se sabe a ciencia cierta que hay diversos mecanismos autoinmunes involucrados.
Sin embargo, se encuentra asociado algún hecho traumático o fuerte de tipo mental o psicológico que haya ocurrido tanto personalmente y/o en su entorno cercano, que combinado con el debilitamiento del sistema inmunológico, precipitan la enfermedad de la esclerosis.
Sólo puede ser diagnosticada con fiabilidad mediante una autopsia post-mortem o una biopsia, aunque existen criterios no invasivos para diagnosticarla con aceptable certeza. Esto para motivos de estudio y ver a futuro en otras personas y saber mas acerca de esta enfermedad.
Por el momento se considera que no tiene cura aunque existe medicación eficaz y la investigación sobre sus causas es un campo activo de investigación. El poder mental, la hipnosis y la mejora en la alimentación mejora la sintomatología y retarda la enfermedad.
Las causas exactas son desconocidas. Puede presentar una serie de síntomas que aparecen en brotes o que progresan lentamente a lo largo del tiempo. Se cree que en su génesis actúan mecanismos autoinmunes.
Se distinguen varios subtipos de esclerosis múltiple y muchos afectados presentan formas diferentes de la enfermedad con el paso del tiempo.
A causa de sus efectos sobre el sistema nervioso central, puede tener como consecuencia una movilidad reducida e invalidez en los casos más severos. Quince años tras la aparición de los primeros síntomas, si no es tratada, al menos 50% de los pacientes conservan un elevado grado de movilidad. Menos del 10% de los enfermos mueren a causa de las consecuencias de la esclerosis múltiple o de sus complicaciones.
Esclerosis múltiple remitente recurrente.- Si un paciente con esclerosis múltiple experimenta una recuperación parcial o total (remisión) tras un brote (recaída), se trata de una forma remitente recurrente de la enfermedad. Con frecuencia, el paciente puede desarrollar una actividad normal y no tiene síntomas entre cada brote.
Esclerosis múltiple secundaria progresiva.- La esclerosis múltiple secundaria progresiva se produce cuando el grado de discapacidad persiste o aumenta entre brotes.
Esclerosis múltiple primaria progresiva.- La esclerosis múltiple primaria progresiva es el tipo menos frecuente. En este caso, la discapacidad y los síntomas se agravan de forma continua desde el principio
Esclerosis múltiple benigna.- Con independencia de esta clasificación, existe un tipo de EM llamada "benigna" en la que el paciente no padece limitaciones esenciales en su vida diaria durante más de 15 años tras el diagnóstico de la enfermedad.
Es habitual que el primer episodio pase desapercibido por la vaguedad de las molestias sin que el sujeto consulte con su médico. A menudo, las primeras manifestaciones se presentan como problemas de la visión, bien en forma de visión borrosa, doble o pérdida de visión.
La mayoría de los pacientes experimenta además sensaciones anormales como hormigueo, entumecimiento y picazón; pérdida de fuerza en los brazos o piernas, y trastornos del equilibrio o de la coordinación. También son frecuentes el vértigo, los problemas para orinar o defecar, los dolores inespecíficos, alteraciones del carácter, etc.
Los primeros síntomas suelen aparecer en personas entre los 20 y los 40 años. Rara vez por debajo de los 15 o por encima de los 60, aunque en las personas mayores no suele detectarse. Como es el caso de muchas enfermedades autoinmunes, es dos veces más común entre mujeres que entre hombres.
Entre los niños, que rara vez desarrollan la enfermedad, la proporción puede llegar a tres niñas por cada niño. En los casos de personas de más de 50 años suele tratarse de hombres.
Diagnóstico de la esclerosis múltiple
El diagnóstico debe ser realizado por el neurólogo. La forma de aparecer la enfermedad acostumbra a ser muy engañosa. Hay fromas de inicio muy típicos: una neuritis óptica retrobulbar por ejemplo ( pérdida de función del nervio óptico, con ceguera de instauración rápida y fondo de ojo completamente normal en la mitad de los casos).
Otras formas de la enfermedad son unos vértigos, que resultan muy poco evidentes y requieren la presencia de un profesional. No es infrecuente que el diagnóstico se realice en el segundo brote o en los siguientes, cuando alguien se percata de la aparición de síntomas neurológicos correspondientes a diversos puntos del sistema nervioso central y que van apareciendo con el paso del tiempo.
La prueba diagnóstica más importante es la resonancia magnética (RM), un tipo especial de imagen diagnóstica obtenida con el paso de ondas magnéticas a través del cuerpo.
No existe cura para la esclerosis múltiple. Sin embargo se han encontrado varios medicamentos que son eficaces en su tratamiento, frenando el desarrollo de la enfermedad y combatiendo los síntomas.
Sólo la variante remitente-recurrente tiene tratamientos aprobados por la FDA y la EMEA. Actualmente, son tres interferones (Avonex, Betaseron -conocido en Europa como Betaferon- y Rebif), un conjunto de polipéptidos llamado Copaxone, un inmunosupresor llamado Mitoxantrone y finalmente un anticuerpo monoclonal llamado Natalizumab y comercializado como Tysabri.
La esclerosis múltiple progresiva primaria es muy difícil de tratar. Los corticoesteroides a altas dosis cada tres meses pueden tener algún efecto. En principio no existe un tratamiento preventivo efectivo para la EM progresiva primaria.
El tratamiento de los síntomas, y la rehabilitación mediante fisioterapia, terapia ocupacional y logopedia, tienen un papel importante. Es muy importante, igualmente, la evaluación por parte de un neuropsicólogo para poder abordar cualquier déficit cognitivo que pudiera instaurarse.
1 comentarios:
Llevo 9 años de lento desarrollo, casi no pudiendo caminar en la actualidad por mis propios medios. Me diagnosticaron una EM Primaria, y lo unico que estoy intentando ahora es el Copaxone, si bien no está indicado para el tratamiento de esta variedad. Habrá que confiar y esperar.
Publicar un comentario